Las razones por las cuales se recalientan los interruptores termo magnéticos, pueden ser: sobrecargas de corrientes, bornes de conexión mal ajustados o fallas por tiempo de uso.
La temperatura correcta de funcionamiento de una llave térmica es de 55ºC aprox. Según se indica en la norma.
Si existen motores implica que existan picos de intensidad en su conexión que incrementan la temperatura de los equipos cada vez que arrancan estas máquinas.
Si además existen armónicos de intensidad, estos armónicos incrementan la intensidad de paso en varios amperios por fase.
En resumen todos los interruptores automáticos sufren calentamiento debido al paso de la intensidad, pero cuando todos los parámetros de temperatura, conexiones, secciones de cable y ventilación son correctos pero la temperatura de funcionamiento está un poco por encima de la temperatura de ensayo se debe a que las intensidades que circulan son en muchos momentos iguales o un poco superiores al amperaje de ellos.
Se recomienda realizar mediciones de potencia de cada circuito, y hacer un cálculo de las cargas verificando el calibre de los conductores y de las llaves térmicas.
No aumentar la potencia de los interruptores automáticos sin antes hacer los cálculos pertinentes ya que una de las funciones de dichas llaves, son el de proteger a la instalación del recalentamiento de los cables ante una sobrecarga.